No son pocas las acciones para incrementar ciertos factores dentro del trabajo: aumento de productividad, disminución de costes, elevación de la satisfacción de los empleados, conciliación de la vida profesional y laboral… Entre ellas, el teletrabajo, desde hace ya unos años, se postula como una de las acciones más completas para que alcances todos estos objetivos. Además, también te ayuda a generar un marco de igualdad de género en el puesto de trabajo. En sectores tan importantes como la protección de datos, donde entidades como Gresprodat aportan su profesionalidad y capacidad de acción en este campo, esta modalidad de trabajo podría suponer un factor importante a la hora de que conseguir los objetivos de la organización.
Aplicación del teletrabajo en el entorno de la Agencia Española de Protección de Datos
Desde su implantación en el año 2017 como programa piloto, el resultado se puede considerar como satisfactorio cada año, aumentando incluso su rango a más trabajadores de la Agencia. Este incremento se ha llevado tanto en 2018, donde la satisfacción fue también alta, como en 2019, y en el que en 2020 ya se ha acogido el 80% de la plantilla. El compromiso de esta entidad es el de mantener esta modalidad mientras los resultados sean positivos, tomando esta forma de trabajo como un mecanismo para mejorar la organización y la conciliación de la vida familiar.
¿Cómo se encuadra el teletrabajo en el marco de la igualdad de género?
Al ofertarse esta modalidad de trabajo a distancia a todos los trabajadores independientemente de su género, un factor importante como la conciliación familiar y laboral se presenta como una opción más accesible independientemente del género. Aunque es cierto que la mayoría de solicitudes y de acceso al teletrabajo se ha producido por el género femenino.
Ten en cuenta que la percepción de los trabajadores de la Agencia es que el acceso a las plazas de teletrabajo, y en general a la promoción dentro de la entidad, presenta un carácter igualitario, y creen, tanto hombres como mujeres, que tienen las mismas posibilidades de ascender y no existen en este sentido brechas de género.
Todo esto se ha publicado en el llamado Marco de actuación en materia de igualdad de género de la Agencia, donde además del teletrabajo se han plasmado otras series de cuestiones que persiguen romper y monitorizar una posible brecha de género.
¿Existe relación entre el teletrabajo y la igualdad de género con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030?
La respuesta claramente es que sí. De hecho, uno de los pilares de estos objetivos es directamente romper con la brecha de género. Como sabes, el teletrabajo permite conseguir que el trabajo, además ser un factor potenciador de la economía mundial, y de que sea digno en su función y ejecución, también sea un órgano de socialización y de conciliación de la vida de las personas, y no un escollo que deben atravesar y afrontar cada día.
En definitiva, como ves, estás ante un informe que demuestra la bondad de un sistema de trabajo, el teletrabajo, que cada vez está más en auge y que está aceptado por la mayoría de los trabajadores. No en vano, es una modalidad que permite una forma de trabajo diferente, pero con una capacidad similar de alcanzar los objetivos planteados, teniendo en cuenta que se puede conciliar la vida laboral y social más fácilmente. Además, es uno de los aspectos que más se ha señalado dentro del marco de actuación en favor de la igualdad de género de la Agencia. Se pone de manifiesto que el teletrabajo en sectores tan importantes como el de la protección de datos en general podría suponer una revolución en el incremento de la productividad.