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Neuromarketing, la estrategia perfecta

Las nuevas tecnologías nos ayudan a estudiar el comportamiento del usuario a través del Neuromarketing. Un concepto en constante desarrollo; sus grandes avances destinados a conocer a  los consumidores,  establecen ésta estrategia como la estrategia del futuro. En la que conocer el comportamiento del usuario es clave, para poder prever futuras acciones de Marketing.

Las empresas de marketing y grandes multinacionales ya vislumbran el gran potencial de este campo, revelándose el neuromarketing como una ciencia encargada de analizar e investigar el comportamiento del consumidor. Entre un 70 y 80 % de las compras realizadas por los usuarios son producidas de forma irracional según estímulos. Independientemente de lo pudiera aparentar, es evidente la importancia de cómo se actúa, escalón al que llega el neuromarketing. A través de diferentes instrumentos, se pueden estudiar y medir los procesos mentales del individuo, conociendo su percepción visual, auditiva y sensorial, así como sus procesos cognitivos, motivaciones y emociones.

[Tweet «El secreto del Neuromarketing está en emocionar al consumidor»]

En el ámbito de la consultoría de marketing existen desde hace tiempo estrategias de neuromarketing muy efectivas, como el carro grande de las grandes superficies para que se compre más o los establecimientos que potencian la percepción olfativa, como panaderías u hornos, para estimular el deseo de compra a través del olor.

Otro ejemplo sería la localización de los productos en las estanterías: mientras los más básicos están al final de los pasillos, los de capricho y los más caros se encuentran a la altura y localización perfecta para los ojos.

Un último caso de neuromarketing utilizado es el precio, cuando acaba en 0.99 o si los productos están desordenados da la impresión de que son más baratos, por lo que se compran más.

El neuromarketing es ya una acción consolidada y eficaz en continuo perfeccionamiento. Conseguir conectar con el usuario para estimularlo y emocionarlo de forma inconsciente es una realidad que las marcas están sabiendo aprovechar.

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