Tal y como señala la AEPD, en los últimos años, a raíz de los cambios legislativos producidos en lo referente a la normativa de protección de datos, han proliferado compañías que ofrecen realizar la adaptación a la nueva normativa a un precio muy reducido. Sí, incluso, en algunos casos, prácticamente a coste cero.
Esta opción puede sonar muy golosa para el gran número de pequeñas y medianas empresas del país, que generalmente cuentan con un nivel de beneficios que les lleva a buscar el ahorro en cualquier aspecto. Sin embargo, escatimar en lo relativo a protección de datos puede salirte, a la larga, muy caro.
Normativa de protección de datos: las malas prácticas
Para evitar caer en la trampa de las compañías que ofrecen de manera casi gratuita la adaptación a la protección de datos, debes conocer cómo funcionan y qué tipo de estrategias siguen para captarte como cliente.
Un cumplimiento que abarca muchas áreas
En primer lugar, cuando solicitas información al respecto del procedimiento, suelen decirte que es algo tan sencillo como rellenar un modelo genérico que es válido para la mayoría de los casos. Sin embargo, esto no es así.
El cumplimiento del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y de la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantía de Derechos Digitales (LOPDGDD) va mucho más allá. No se queda en un mero trámite formal, sino que implica llevar a cabo la realización, el diseño y la aplicación de una serie de principios que son propios y específicos de cada autónomo o empresa.
Competencia desleal y publicidad engañosa
Otra técnica habitual de las empresas de este tipo es no solo vender la imperiosa necesidad de cumplir con la legalidad, sino vender una gran dificultad de lograrlo que no es tal. Venden para ello conceptos equivocados, como la obligatoriedad de contar con la figura del Delegado de Protección de Datos, que no existe en gran parte de los casos.
Además, para dar una sensación de formalidad, muchas de estas compañías añaden en sus textos logotipos de organismos oficiales, con el fin de darse una relevancia de la que carecen.
Uso fraudulento de fondos de la formación bonificada
Determinadas compañías también ofrecen una supuesta gratuidad del servicio, ofertando que el coste está cubierto por la formación bonificada. En virtud de ello, abonas el importe a la empresa para, después, bonificarte esa cantidad en las cotizaciones a la Seguridad Social.
Este extremo es incorrecto y puede llegar a acarrear sanciones económicas que afectan directamente a quien practica la bonificación, quedando exenta de responsabilidad la empresa realmente responsable del fraude. Las multas son, como mínimo, de 626 euros. A esto y hay que sumar la devolución de las cuantías bonificadas.
Problemas con la Agencia Tributaria
El IVA es otro caballo de batalla en la lucha contra las empresas que promueven estos servicios de nulo valor. Y es que, enlazando con el punto de la formación bonificada, esta se encuentra exenta del Impuesto sobre el Valor Añadido. Sin embargo, un correcto servicio de adecuación a la normativa de protección de datos sí lleva IVA, por lo que estarás dejando de pagar la cantidad correspondiente al tributo.
Las infracciones tributarias en este sentido ascienden a un mínimo del 50 % de la cantidad no ingresada, así como, lógicamente, el pago de esta.
Confía en servicios de calidad
El cumplimiento de la normativa de protección de datos está detrás de cualquier actuación que lleves a cabo en tu negocio. ¡Incluso hay que velar por ello a la hora de mandar las típicas felicitaciones de Navidad a los clientes!
Para lograr un cumplimiento fiel, veraz y que te haga dormir tranquilo, fíate solo de fuentes oficiales. Asimismo, deposita tu confianza en empresas como Gesprodat, donde huimos de las prácticas a coste cero, dándote un servicio de calidad y legal.