Hoy en día, muchas organizaciones apuestan por una estrategia de negocio en el marco de la LSSICE. Pero esta estrategia no debe quedar obsoleta: debe ser creativa y encontrar su sitio dentro de la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos). Así, se logrará que la empresa sea vista como una organización adaptada a los cambios que se están produciendo en su entorno.
Una buena opción para trabajar esta estrategia creativa es el contar con el apoyo de empresas del ámbito de la consultoría, que realicen una auditoría a la estrategia de negocio de la empresa para así trabajar dicha estrategia dentro de la adaptación de la LOPD.
La comunicación debe ser clara, competitiva y simple
Cuando se pone en marcha una estrategia creativa, se debe saber que será la solución que se dé a un problema de comunicación. Antes de comenzar a trabajar en ella, es necesario establecer cómo se va a decir lo que se quiere comunicar, ya que el mensaje irá dirigido a unos consumidores o clientes potenciales específicos.
Para que esta estrategia de comunicación sea efectiva, debe ser clara (cuál es el objetivo de la comunicación, a qué público y a qué objetivos se quieren llegar), competitiva (por qué los consumidores deben elegir a una marca frente a otra de la competencia) y simple (las ideas deben ser sencillas, concisas y fáciles de recordar).
Las claves a la hora de comenzar a planificar una estrategia creativa son: tener claro el objetivo de la comunicación y el público o target al que va dirigida (cómo se le deben transmitir las ideas), poder precisar los beneficios que se obtendrán gracias a esa comunicación y el motivo por el que se está realizando, posicionar la marca en el mercado y respetar tanto la imagen de la marca como el tono que se va a usar.