Los datos que se almacenan en un ordenador pueden tener un alto valor, tanto para particulares como para empresas. El cumplimiento de la LSSICE y la LOPD, esta interconexión de derecho y nuevas tecnologías, ayuda a proteger la información, pero puede resultar insuficiente. Por este motivo, los interesados en mantener a salvo sus datos recurren frecuentemente a los servicios de la consultoría de protección de datos.
En efecto, además de cumplir con la ley, deben tomarse, voluntariamente, una serie de precauciones de partida para evitar perder los datos alojados en las computadoras.
En primer lugar, conviene afinar con la contraseña y elegir una totalmente segura, es decir, no relacionada con información básica que pueda deducirse fácilmente. En este aspecto, ha de tenerse sumo cuidado a la hora de transmitir información personal por las redes sociales. Por ejemplo, anunciar que no se va a estar disponible puede facilitar las tareas a los hackers. Tampoco se han de aceptar las solicitudes de amistad de desconocidos, pues pueden usar información personal para sustraer información. Caer en ciberestafas relacionadas con premios u ofertas de dudosa procedencia también pone en peligro los datos.
Por otra parte, no se debe demorar la realización de copias de seguridad, las cuales han de cifrarse y guardarse en lugares distintos a los que ocupan los equipos. Otro riesgo que ha de evitarse es el de sacar información del trabajo en distintos dispositivos. Asimismo, la descarga indiscriminada de apps puede originar problemas con los permisos que se les conceden y su relación con la protección del ordenador.
Aparte, se ha de tener cuidado con la conexión de unidades USB desconocidas, ya que pueden infectar el equipo. Tener un antivirus actualizado neutralizará o minimizará estos problemas.
En resumen, diferentes consejos para proteger la información del ordenador ante pérdidas y robos.