La seguridad de los datos es, sin duda, una prioridad para las empresas. Los continuos ciberataques producidos a grandes compañías han puesto de manifiesto la necesidad de blindar la seguridad digital, ya que pueden exponer información sensible de millones de usuarios.
Analizamos, a continuación, cómo pueden producirse brechas de seguridad: las causas comunes de estas vulneraciones y cómo puedes fortalecer tu estrategia de protección.
¿Qué es una brecha de seguridad?
Según la Agencia de Protección de Datos una brecha de seguridad es un incidente de seguridad que afecta a datos de carácter personal. Este incidente puede tener un origen accidental o intencionado y además puede afectar a datos tratados digitalmente.
Según el Artículo 33 del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), las organizaciones deben notificar a la autoridad de control competente acerca de una brecha de datos personales en un plazo de 72 horas después de haberse percatado de la misma, siempre que sea probable que esta constituya un riesgo para los derechos y libertades de las personas naturales.
Ejemplos recientes de brechas de seguridad
Recientemente, Iberdrola y el Banco Santander han sufrido ciberataques significativos. Iberdrola reportó el robo de datos personales de aproximadamente 850,000 clientes, mientras que el Banco Santander enfrentó un ciberataque que comprometió tanto a clientes como a empleados en España.
Por otra parte, la DGT está investigando el robo de millones de datos sensibles relacionados con los conductores y sus vehículos, desde las matrículas de sus coches hasta documentos relacionados con los trámites que han podido realizar en esta institución. Y Ticketmaster también investiga una brecha de seguridad que pudo afectar los datos de 560 millones de usuarios de esta plataforma de compra de entradas.
Estos incidentes subrayan la escala y gravedad de los desafíos de seguridad a los que se enfrentan hoy las grandes corporaciones.
Tipos de brechas de seguridad y sus causas comunes
Las brechas de seguridad pueden clasificarse de varias formas, incluyendo ataques por software malicioso, acceso indebido por parte de empleados, o fallos en la infraestructura tecnológica. Los errores más comunes que llevan a estas brechas incluyen:
- La gestión inadecuada de las credenciales de acceso.
- La falta de actualizaciones de seguridad en los sistemas.
- El desconocimiento o negligencia de los empleados respecto a las mejores prácticas de seguridad.
¿Cómo mejorar la seguridad y prevenir futuras brechas?
Para prevenir futuras brechas, es crucial implementar estrategias de seguridad multifacéticas. Es recomendable una evaluación y fortalecimiento continuo de las políticas de seguridad, la formación regular de los empleados en ciberseguridad y el uso de tecnologías avanzadas para la detección temprana de vulnerabilidades.
En este contexto, los servicios especializados en el ámbito de la gestión de brechas de seguridad son esenciales. Estos servicios están diseñados para ayudar a las empresas a cumplir con la normativa vigente, como el RGPD, y a implementar prácticas de seguridad robustas que protejan tanto a la empresa como a sus clientes.
Comunica-Brecha RGPD es un recurso de utilidad para que cualquier organización, responsable de un tratamiento de datos personales, pueda valorar la obligación de informar a las personas físicas afectadas por una brecha de seguridad de los datos personales.
La adopción de medidas de seguridad avanzadas y el cumplimiento de las normativas como el RGPD son pasos fundamentales para mitigar estos riesgos. En un mundo totalmente digitalizado, asegurar la integridad de los datos no es solo una necesidad, sino una obligación para todas las empresas que aspiran a prosperar en la era digital.
Si tienes cualquier duda sobre cómo blindar y proteger tus datos y los de tus clientes, no dudes en consultarnos.