Si eres padre o madre, seguro que más pronto que tarde se te presentará el dilema de los niños y su primer móvil. Te preocuparás mucho por su sobreexposición en Internet, las adicciones que, en ocasiones, genera y que sea objeto de acoso, etc. Por todo ello, quizás no sepas cuándo es el mejor momento de enfrentarte a esta situación. En Gesprodat, sabemos que no es fácil, así que queremos proporcionarte una serie de herramientas.
¿Qué opina la AEPD sobre la llegada del primer móvil?
La AEPD es consciente de la presión que soportan los padres cuando sus hijos les piden un móvil. Esta viene motivada, por un lado, por el propio niño, que ve cómo la mayoría de sus iguales ya cuenta con uno y cree que se está quedando fuera del grupo por no tener el suyo.
Y, por otro, por la necesidad de saber dónde está, ya que el menor comienza a tener una mayor autonomía y a moverse por su cuenta. En general, los progenitores piensan que los niños con móvil serán más localizables.
Sin embargo, la AEPD no establece ninguna edad concreta como la más apropiada para que tengan un smartphone. Lo que sí ha tenido presente son las recomendaciones de UNICEF y ha elaborado un decálogo, La guía que no viene con el móvil, para una mayor protección de la infancia.
Todas las sugerencias pasan por crear lazos de confianza y diálogo con el pequeño. También aconseja acompañarle en sus primeros pasos y transmitirle una serie de valores e información para que haga un uso responsable de estos dispositivos.
Algunas recomendaciones útiles sobre los niños y su primer móvil
En primer lugar, debes plantearte si verdaderamente tu hijo necesita un teléfono móvil. En relación con esto, son muy interesantes algunas iniciativas que están llevando a cabo asociaciones de padres por España.
Muchos de ellos han empezado a hacer alianzas con otros progenitores en su misma situación y en ámbitos cercanos. Por ejemplo, es el caso de los padres de alumnos del colegio Can Manent en Cardedeu (Barcelona), que, en junio de 2023, acordaron retrasar el primer móvil hasta los 16 años. Es la edad que el RGPD establece como idónea para consentir el tratamiento de datos.
Sin embargo, tarde o temprano, llegará ese momento y las sugerencias apuntan a las siguientes direcciones:
- Dáselo de manera gradual: Al principio, en lugar de disponer de uno, puedes configurar un perfil en el tuyo. De este modo, sabrás cómo lo utiliza y te resultará más fácil determinar el momento en el que ha adquirido un grado de madurez suficiente para tener su propio aparato.
- Establece normas de empleo: Aquí incluimos el horario en el que puede usarlo, el tipo de contenido prohibido, las reglas para interactuar con otras personas, etc. Es importante que utilices herramientas de control parental, pero estas no deben sustituir al diálogo y que te cuente qué ha hecho durante su conexión.
- Infórmale sobre los peligros de la tecnología: Háblale de todos los ciberdelitos que pueden amenazarle, como el grooming o el ciberbullying y cómo actuar si le ocurre. Es crucial que le insistas en que no debe enviar bajo ningún concepto fotos comprometidas suyas ni proporcionar sus datos de localización.
El tema de los niños y su primer móvil es una gran preocupación para casi todos los padres con hijos en esa transición entre primaria y secundaria. No obstante, puede ser mucho más sencillo si sigues ciertas pautas, como el establecimiento de normas y un buen acompañamiento.
