¿Vives huyendo de la publicidad comercial? ¿No soportas que te ofrezcan información o servicios que no has solicitado? Estamos tan acostumbrados a la omnipresencia de la publicidad en nuestra vida que quizás pensemos que es imposible librarse de este acompañante molesto. Sin embargo, contamos con herramientas para tratar de esquivarlo.
Recursos para evitar la invasión publicitaria
En España, distintas disposiciones normativas nos protegen ya de las comunicaciones intrusivas con fines comerciales. Pero, además, existen determinados hábitos que podemos adquirir y poner en práctica para librarnos del spam o publicidad indeseada.
En este artículo pretendemos mostrarte algunas estrategias que pueden ayudarte a combatir las comunicaciones comerciales no deseadas.
¿Qué son las listas de exclusión publicitaria?
Es un sistema que permite a los diseñadores de campañas publicitarias saber de antemano a quién pueden incluir en sus comunicaciones y a quién no. Si nos inscribimos en una de esas listas de exclusión ya no recibiremos publicidad de productos o servicios que no hemos solicitado.
Seguramente habrás oído mencionar la Lista Robinson. A día de hoy, es la única lista de exclusión publicitaria a la que recurrir en España. Inscribirse en ella no tiene coste y su eficacia comienza a operar dos meses después de la inscripción. No impedirá que nos llegue publicidad si ya somos clientes de la empresa emisora de la misma o hemos consentido su recepción en algún momento anterior.
Nunca facilitar datos a cambio de ventajas
¿A quién no le gusta beneficiarse de ofertas, descuentos o regalos? El ofrecimiento es tentador, pero cuando es a cambio de facilitar datos personales o del consentimiento para utilizarlos con fines comerciales, deberíamos pensarlo dos veces.
Quizás no recuerdes aquel día en el que para participar en el sorteo de noches de hotel gratis rellenaste un formulario con tus datos y, además, aceptaste las condiciones de la promoción. Sin embargo, desde entonces, puedes estar siendo víctima del bombardeo de información comercial sin ser muy consciente de cuándo y por qué consentiste en ello.
El mismo riesgo se corre con las conocidas campañas de fidelización que otorgan ventajas a cambio de obtener datos con los que elaborar perfiles de clientes con información jugosa para diseñar las estrategias de publicidad y venta de productos o servicios.
Moraleja: lee siempre con detenimiento las condiciones de privacidad y sopesa si te compensa consentir por defecto el tratamiento de tus datos personales.
El riesgo de crear perfiles de usuario
Nuestros teléfonos móviles se han convertido en una caja de herramientas virtuales, llena de aplicaciones para todos los usos imaginables. Pero la creación de perfiles de usuario para poder utilizarlas puede ser otro arriesgado modo de consentir el uso de nuestros datos personales y ocasionar la recepción publicitaria indeseada.
Aunque acabemos borrando la aplicación o solo la hayamos usado unas horas, en realidad nuestro perfil de usuario sigue activo y, por lo tanto, la opción de recibir comunicaciones comerciales también.
Una buena decisión puede ser hacer uso de servicios online, sin necesidad de descargar la aplicación ni crear un perfil de usuario. Y, por supuesto, configurar de forma correcta los perfiles y borrarlos cuando ya no nos sean de utilidad.
El derecho de oposición
Como su propio nombre indica, el derecho de oposición supone que puedes manifestar tu voluntad contraria a que las empresas u organizaciones que dispongan de tus datos personales los utilicen para hacerte llegar comunicaciones comerciales.
En toda la información comercial que te envíen deberán ofrecerte un modo sencillo para ejercer dicha oposición y, en caso de no hacerlo, siempre podrás recordarles que están obligados a facilitártelo.
En el ejercicio y aplicación práctica de todas estas opciones, derechos y estrategias, no dudes en recurrir a los profesionales que, como Gesprodat, son expertos en la protección de datos.
