El pasado 28 de enero se celebró el Día Internacional de la Protección de Datos y, qué mejor escenario que este, para que la Agencia Española de Protección de Datos diera a conocer el Pacto Digital. Un instrumento destinado a ayudar a las empresas en su camino hacia la innovación y el progreso, pero que también protegerá tus datos particulares y tu privacidad en el entorno digital.
Apostando por la convivencia en el ámbito digital
Cada actividad que realizas online deja un rastro de datos. Esa información es especialmente valiosa para las empresas, ya que les ayuda a comercializar mejor sus productos y servicios. Pero esto puede suponer una vulneración de nuestra intimidad y nuestra privacidad.
Conseguir el equilibrio entre los intereses empresariales y los particulares no es nada fácil. No obstante, este pacto que estamos analizando supone un paso adelante muy importante. Se trata un instrumento diseñado específicamente para fomentar la transparencia en la recopilación de datos y concienciar tanto a las empresas como a los ciudadanos de lo fundamental que es proteger ciertos tipos de informaciones.
Contenido esencial del Pacto Digital
A fin de ordenar de forma más clara la información y que esta sea accesible para todo el mundo, este documento consta de varias partes importantes.
Carta de adhesión
Implica que todas las entidades que firmen este documento quedan adheridas al pacto y se comprometen a cumplirlo, haciendo los cambios que sean necesarios en la forma de trabajar en la organización.
Compromiso por la responsabilidad en el ámbito digital
Este apartado enumera las obligaciones que deben asumir las organizaciones que se adhieran al pacto. En realidad, son las mismas obligaciones que ya recoge la legislación vigente, pero expuestas de forma más sencilla e incorporando además principios de ética digital.
Su contenido se divide en varios apartados:
– Obligaciones específicas en el ámbito digital: hacen referencia a la necesidad de informar a los usuarios sobre el tratamiento de datos que se va a hacer, la importancia de garantizar la licitud del tratamiento, designar un Delegado de Protección de Datos y aplicar técnicas que garanticen la privacidad en todo el proceso de tratamiento de datos.
– Responsabilidades en el ámbito digital: diferencia entre la responsabilidad administrativa, civil y penal que se puede exigir a las empresas cuando tratan datos de adultos, y supuestos específicos de responsabilidad agravada si los datos afectan a menores de edad.
Decálogo de buenas prácticas en privacidad
Esta sección del documento está orientada a medios de comunicación y organizaciones que tengan canales de difusión propios. El objetivo principal es luchar contra la violencia digital.
Las organizaciones que firmen este documento se comprometen a evitar realizar acciones que puedan dar lugar a la identificación de las víctimas cuando se lleve a cabo la difusión de contenido sensible. Muy especialmente si estas personas no tienen ningún tipo de relevancia pública.
También se comprometen a evitar la repetición sistemática de imágenes y contenidos que puedan herir la sensibilidad y, en la medida de lo posible, difundirán información sobre las responsabilidades legales que se pueden derivar de dar difusión de este tipo de contenidos.
Con este instrumento la AEPD refuerza su voluntad de ofrecer una protección eficaz a la intimidad de las personas mediante un adecuado tratamiento de los datos y la información. Destacando el respeto a la privacidad como un activo para las organizaciones públicas y privadas.
El Pacto Digital quiere poner de relieve que junto a los derechos que se dan en el entorno online también debemos asumir una serie de obligaciones. Es responsabilidad de todos los que estamos implicados usar bien los datos y proteger la intimidad de las personas.