Durante los últimos meses, todos los teléfonos móviles de gente joven, y no tan joven, han descargado la misma aplicación: FaceApp. Esta aplicación, a priori inofensiva, se encarga de aplicar diversos filtros a una imagen del rostro de quien la utilice haciéndole parecer más viejo, más joven o cualquiera de los efectos disponibles. El problema principal es que FaceApp vende tus datos.
¿Qué es FaceApp?
Pero esta aplicación no es nueva, lleva desde 2017 en el mercado y ha tenido otras épocas donde ha brillado como ahora. No obstante, ha vuelto a situarse en la cima de la popularidad gracias a su increíble realismo a la hora de envejecer a las personas con el uso de su filtro. Aunque, como veremos, no es oro todo lo que reluce.
¿Cómo funciona FaceApp?
El funcionamiento de la aplicación es lo más sencillo del mundo. El usuario utiliza la cámara de su móvil para tomar una foto de su cara. Una vez está la foto en la aplicación, puede aplicar sobre ella diversos filtros para conseguir diferentes aspectos. El más famoso de todos ellos es el que convierte a la persona en un anciano.
Lo que hace la aplicación es modificar los rasgos de la cara que muestra la foto mediante el uso de inteligencia artificial para generar esa apariencia envejecida del rostro. FaceApp hace uso de una base de millones de rostros que se encuentran almacenados de forma digital para ir cambiando la imagen de la cara, cotejándola con los datos que tiene, hasta formar una cara parecida pero envejecida.
FaceApp se guarda el derecho de usar tus datos y fotos con fines comerciales
El principal problema de esta aplicación se encuentra en su política de privacidad. Para empezar, porque incumple el RGPD, pues almacena datos del usuario sin que éste pueda acceder a ellos.
Concretamente la aplicación guarda los siguientes datos del usuario: las fotos, el contenido multimedia que se sube a la aplicación, los datos sobre el uso de la misma, cuáles son las opciones más utilizadas, etc. Un identificador se asocia al móvil una vez se instala la aplicación.
Como se puede observar, la aplicación guarda principalmente los datos de uso del usuario y los comparte con la empresa que la maneja y con las filiales. Por otra parte, es algo que también hacen otras aplicaciones muy conocidas como Twitter o Instagram. Algo desde luego bastante prohibido por la legislación.
Uno de los principales motivos de queja en la aplicación es que cuando se sube una foto a esta, se cede el uso a la empresa. Es decir, según las condiciones que aceptamos cuando la instalamos, toda imagen que utilicemos en ella podrá ser usada con fines comerciales por la empresa de FaceApp.
¿Cómo eliminar tu información personal si has utilizado esta aplicación?
Para poder eliminar la información personal que tiene la aplicación sobre ti cabría esperar que hubiera algún tipo de opción dentro de la propia aplicación, pero no la hay. En FaceApp han complicado un poco el asunto y lo que hay que hacer es enviar un mensaje.
Así es, es necesario mandar una solicitud pero desde la propia aplicación, eso sí. En la opción de <<configuración>> de la aplicación hay un apartado llamado <<soporte>>. Una vez ahí hay que pinchar en <<reportar un error>>. Y desde ahí se envía un mensaje en el que se solicita la privacidad del cliente y que los datos sean inmediatamente borrados de la base de información de la empresa.
No obstante, el usuario no recibe información acerca del estado de sus datos y, por tanto, no hay ninguna garantía real de que estos hayan sido verdaderamente eliminados. Pero de momento es la única alternativa que da la aplicación a sus usuarios.
Otras apps que recaban información sin consentimiento
Por desgracia, esta no es la única aplicación que recaba información sin el consentimiento del usuario acerca de ello. En la propia Google Play se ha demostrado que hay miles de aplicaciones que se saltan la normativa sobre protección de datos y recaban información de sus usuarios incluso cuando estos desactivan dicha opción.
La mayoría de estas aplicaciones mediante el uso de códigos ocultos que permiten consultar los datos personales dentro del propio teléfono, tales como los archivos multimedia o incluso los cookies y números de los contactos.
Y todo esto sin el permiso del usuario, lo que es exigido por la legislación europea en materia de protección de datos. Afortunadamente, entre los datos más seguros se encuentra la ubicación del GPS, al cual es imposible acceder sin el conocimiento y la posterior verificación del usuario.
Así pues, aunque es peligrosa también, porque no se debe olvidar que FaceApp vende tus datos, todas las aplicaciones que almacenan la información de su usuario son un peligro en potencia y no se puede nunca bajar la guardia.