Hace unos meses, el Parlamento de Estrasburgo aprobó la nueva ley de copyright europea. Para algunos, esta normativa pone en peligro la propia existencia de Internet tal como se conoce hoy. No obstante, y sin ser tan alarmistas, es importante contar con conocimientos en Derecho de las Nuevas Tecnologías para evitar tener problemas al subir vídeos o información a la Red.
¿Qué podrás y qué no podrás hacer en Internet tras la aprobación de la nueva ley de ‘copyright’ europea?
Para explicar lo que se puede seguir haciendo y lo que no tras la aprobación de la nueva ley de copyright europea, es necesario diferenciar entre la descarga de contenidos y la subida de los mismos.
En cuanto al primer punto, se puede seguir bajando contenidos de Internet como hasta ahora. No obstante, siempre cumpliendo las reglas que impone la ley de derechos de autor en Europa. Es decir, no se pueden difundir esos contenidos sin autorización de sus creadores.
Pero las grandes diferencias que va a marcar la nueva norma europea tienen que ver con la subida y publicación de contenidos en la Red. En este sentido, impone severas restricciones y, por ello, quienes se oponen a ella la califican como «un ataque a la libertad de expresión».
Con la nueva ley, las grandes plataformas de vídeo y otros contenidos tendrán que asegurarse de que lo que publican no atenta contra la citada ley de derechos de autor en Europa. Por ejemplo, dos tan populares como Youtube o Facebook tendrán que establecer unos filtros. Estos funcionarán mediante un algoritmo que deberá bloquear cualquier contenido que llegue a la plataforma y no respete esos derechos de autor.
En principio, puede verse bien que se respeten los derechos de los creadores. El problema es que se trata de una norma tan restrictiva que, incluso, los vídeos propios pueden ser bloqueados.
Por ejemplo, se puede imaginar que se sube a Facebook un vídeo de una boda donde se escucha una canción sujeta a derechos de autor. Inmediatamente, la plataforma bloqueará la publicación de ese contenido.
Respecto a lo que se está explicando, la norma solo establece una excepción. Las pequeñas plataformas de contenidos no estarán sujetas a ella. Es decir, no tendrán que contar con esos algoritmos para bloquear contenidos. La explicación es sencilla: algo tan costoso supondría su ruina.
Por otra parte, la norma incluye la imposición de un canon por la publicación de noticias o fragmentos de las mismas procedentes de otros medios. Como ya se sabe, en Internet hay portales que se nutren de informaciones aparecidas en periódicos y boletines de noticias. En España es muy popular Menéame, que seguro resultará familiar. Ahora tendrá que abonar un impuesto para seguir haciéndolo.
Últimos cambios que se han llevado a cabo
Por tanto, las dos grandes novedades de la nueva ley afectan a los potentes distribuidores de contenidos, que son los más utilizados por los usuarios. Y la norma regula su funcionamiento a través de dos artículos que han sido los que más polémica han levantado.
Artículo 11
Establece las reglas para compartir contenidos informativos procedentes de otros medios de comunicación y, por tanto, sometidos a derechos de autor. Así, brinda a estos la posibilidad de cobrar un canon a portales como el citado Menéame por ello.
Realmente, esta idea no es nueva. Como se puede recordar, hace unos años se trató de implantar en España el canon AEDE, más conocido como Tasa Google. Aquel proceso terminó con el cierre de Google News y con la no aplicación de este impuesto.
Sin embargo, ahora las plataformas de difusión de noticias tendrán que pagar por su publicación cuando procedan de otros medios. O, de lo contrario, censurar la aparición de esas informaciones.
Artículo 13: en concordancia con la ley de derechos de autor en Europa
Pero quizá sea el artículo 13 el que más afecte a un usuario de plataformas como Youtube. A partir de ahora, cualquier contenido que se desee publicar tendrá que estar libre de derechos de autor. De lo contrario, la plataforma lo bloqueará.
Por ejemplo, si se publica un vídeo de humor donde se escucha un fragmento de canción sujeta a propiedad intelectual. El algoritmo de Youtube impedirá publicarlo. Pero, además, lo mismo sucederá, por ejemplo, si se sube un «meme» al muro de Facebook aprovechando una imagen sujeta a derechos de autor. O si se cuelga un selfie donde se vea al usuario en un acontecimiento deportivo. Todo ello será censurado.
La buena noticia de todo ello es el usuario, como tal, no será sancionado. Las multas irán a parar a los grandes portales de Internet. Pero una imagen de este tipo o vídeo no serán publicados en ningún caso.
En conclusión, la nueva ley de copyright europea puede acabar con Internet tal como se conoce. Lo que es seguro es que, a partir de ahora, las redes tendrán mucha menos riqueza de contenidos y también de humor.