En la época de la comunicación en la que vivimos, siempre conectados, los menores de la casa no se escapan de esta necesidad de estar conectados. Uno de los momentos más críticos que experimentamos es el de dar a los niños su primer móvil. Cuando ofrecemos a nuestros hijos un dispositivo con conexión a Internet, sea un smartphone o una tablet tenemos que seguir una serie de precauciones para que su navegación por la red sea segura. ¿Están nuestros hijos protegidos en internet?
Uno de los problemas más comunes es que los niños descargan aplicaciones sin que los padres lo sepan o bonus para juegos y esto se descubre con el extracto de la tarjeta bancaria a la que están vinculadas las aplicaciones. Por esto es necesario que antes de ofrecerle un dispositivo con conexión a la red, activemos el control parental para la compra y descarga de aplicaciones. Con esta opción, antes de proceder a la compra llegará un mensaje al adulto para que sea él quien tenga que autorizar esa actividad, tanto en la Apple Store como en Google Play.
Con la cantidad de información que hay en la red, es necesario también que limitemos el navegador para evitar no solo que si los niños lo buscan no puedan acceder sino para que no les llegue información sexual o violenta sin buscarla.
Últimamente se están identificando adicciones a las nuevas tecnologías, para evitar que los menores se enganchen debemos también controlar las horas de uso. Estos dispositivos se caracterizan por su portabilidad, así que si realmente queremos evitar que lo usen a escondidas o demasiado tiempo, existen opciones para limitar las horas de uso. Si las horas están restringidas no solo no lo usarán durante mucho tiempo sino que aprovecharán más el tiempo de utilización de estos aparatos.
Es fundamental también contar con un antivirus y firewall que evite la publicidad para mayores en las ventanas emergentes.
Pero, ¿están nuestros menores protegidos por la ley?
La LOPD es la normativa vigente en materia de protección de datos y exige que se informe en el momento de la instalación de que recopilarán sus datos. Cabe recordar que una autorización dada por un menor de 14 años no será válida y que los desarrolladores están obligados a eliminar todos los datos almacenados en sus servidores cuando se desinstale la aplicación.
La LSSICE es la normativa vigente en materia de servicios de la sociedad de la información y es la que obliga al responsable de la APP a mostrar un aviso legal para que se sepa quién es el responsable tanto de la aplicación como del almacenamiento de datos de usuario. Es aquí donde se debe pedir la solicitud para compartir datos con terceros o para usos publicitarios. Nuestra recomendación es que únicamente autoricemos el uso de datos personales necesarios para utilizar la aplicación.
Si tenemos dudas sobre el uso de nuestros datos por parte de desarrolladores, nos preocupa la presencia de nuestros menores en la red, lo mejor es dirigirnos a una Consultoría de protección de datos donde los expertos en Derecho de Nuevas Tecnologías puedan asesorarnos o ayudarnos si tenemos que solicitar que eliminen nuestros datos.
