Muchas empresas cuando acuden a una consultoría de marketing lo hacen con una duda: ¿por qué mi página web ya no vale? Son empresas que en su momento lanzaron a Internet su propio site, pero que ya no obtienen los resultados esperados.
Las empresas de marketing se encargan de verificar qué puede estar ocurriendo y cómo se puede reflotar esa página web para encandilar al rey de los buscadores, Google, de forma que la página esté bien posicionada.
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Existen diferentes parámetros que pueden lograr un mejor posicionamiento SEO en los resultados de búsqueda de Google:
Relevancia y autoridad
Google, antes de ofrecer un resultado, tiene en cuenta la relevancia de la página y, para ello, se basa en el contenido que ofrece: cómo ese contenido responde mejor a una consulta realizada por el usuario. En este punto, el marketing online es imprescindible para precisamente generar contenido que el buscador considere de relevancia.
La autoridad (cómo de fiable es una página web) se consigue a través de enlaces desde otras páginas web, que de esta forma, la recomiendan. Eso sí, Google comprobará si esos enlaces son ciertos y no basados en técnicas de black SEO.
Diseño y experiencia de usuario
Posicionarán mejor las páginas web que ofrezcan una buena experiencia de usuario: usabilidad (que sea posible acceder a ellas desde cualquier dispositivo), tiempo de carga, etc. Google tendrá en cuenta tanto el porcentaje de rebote como el tiempo de permanencia en la web.
Redes sociales
Las redes sociales influyen indirectamente en el mejor posicionamiento SEO: cuantos más visitas tenga la página web procedentes de redes sociales, mejor posicionamiento tendrá en el buscador. Otros aspectos a tener en cuenta son el título de la página, la meta descripción, la etiqueta H1 y la url, que ayudarán a que Google identifique mejor de qué trata la web.
