El derecho al honor y a la intimidad, así como a la privacidad, son reconocidos por la Constitución como derechos ciudadanos fundamentales. Con la aparición de Internet, se aprueba en 1999 la LOPD, para más tarde, en 2002, promulgarse la LSSICE (Ley de servicios de la sociedad de la información y el comercio electrónico). Ambas normas actualmente regulan la protección de los derechos ciudadanos en la red. Sin embargo, ¿cómo actúan las redes sociales para cumplir esta regulación?
Facebook y la Censura
Facebook establece filtros de control de la publicación de imágenes con contenido sexista, agresivo, criminal o que incite al odio. No obstante, su política de privacidad ha causado cierta polémica entre los internautas. Sus continuas quejas han hecho que la red social se replantee sus normas comunitarias, de suerte que:
• Están prohibidas las fotos de desnudos, excepto las que tengan que ver con la maternidad y las obras de arte.
• Quedan prohibidas las imágenes que inciten al odio y a la violencia, así como aquellas que reflejen actividades criminales.
Facebook cuenta con un numeroso equipo que trabaja las 24 horas del día para localizar cualquier tipo de infracción. Y lo que no abarcan sus trabajadores lo cubren los algoritmos tecnológicos. Cuando una imagen «inapropiada» se localiza, Facebook bloquea la cuenta del administrador por un periodo de 24 horas. El usuario recibe un email donde se le informa de los cambios que ha de realizar en su cuenta. De no ser así, Facebook puede bloquear la página indefinidamente e incluso eliminarla.
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El Derecho regulador de las nuevas tecnologías, integrado por la LOPD y la LSSICE, abarca a veces demasiados frentes que no todas las empresas saben manejar por sí solas. De ahí que la mayoría de ellas hayan depositado su confianza en una consultoría de protección datos, con el fin de adaptar en su totalidad su funcionamiento a las leyes aplicables.
