La certificación ISO 22000 es una de las herramientas más desarrolladas por cualquier consultoría con sede en Madrid o en cualquier otro lugar que preste asesoramiento a empresas del sector alimentario cuyos horizontes mercantiles apunten a la gran distribución y el comercio exterior. Obtener ese grado de certificación en seguridad alimentaria conlleva pasar una exhaustiva auditoría, de la cual se desprenden diferentes logros muy importantes. Por ejemplo, algunos de ellos, entre otros, son los siguientes: afianzar la fidelidad del consumidor en la marca que queremos, optimizar los costes y fomentar la cooperación con las Administraciones públicas garantes de la inocuidad de los productos puestos a disposición del consumidor.
Las entidades reguladores deben adecuarse a la LOPD y LSSICE
La norma ISO 22000 representa un elemento internacional de armonización de los requisitos implementados para la gestión de la seguridad de los alimentos en los tres eslabones: producción/transformación, distribución y comercialización. Configurada como una estructura análoga a la ISO 9001, su fiel cumplimiento no presupone en absoluto el de la 22000, dado el mayor alcance de esta última.
Los procedimientos de certificación de sistemas de gestión de calidad ISO 22000 recaen sobre las entidades certificadoras, entre las cuales destaca Aenor. Cualquiera de estas entidades realiza una auditoría del sistema propuesto por el cliente, cotejando documentación, nivel de implantación y grado de asimilación por la plantilla. Esta auditoría se extiende sobre las instalaciones de la empresa para revisar la credibilidad del sistema de gestión; ulteriormente, a través de evaluaciones periódicas, se verificará el mantenimiento del respeto a la ISO 22000.
Dado que las entidades certificadoras retienen abundantes datos confidenciales, deben asegurar su escrupulosa adecuación a la LOPD, ley que establece fuertes servidumbres a las empresas que disponen de archivos con datos de carácter personal. Asimismo, están obligadas a la adaptación a la LSSICE, que vincula a titulares de páginas web y ciberoperadores, regulando los servicios electrónicos.
Para cualquier empresa alimentaria con elevadas miras comerciales, parece ineludible el soporte de una consultoría profesional que le marque el camino que debe seguir para alcanzar la certificación ISO 22000.
