Los grandes eventos o celebraciones son momentos en los que aumenta el número de estafas y timos, sobre todo en Internet. Correos electrónicos de ofertas espectaculares suelen ser el gancho para atraer al internauta hacia webs que ofrecen increíbles oportunidades, cuando son en realidad engaños. Alguna consultoría de marketing online y auditoría en Valencia, ya ha comenzado a difundir esta advertencia, para avisar a los usuarios de que, en fechas cercanas a eventos como el Mundial de fútbol, proliferan este tipo de estafas: venta de entradas falsas, merchandaising del evento que nunca llega o propuestas de viaje que quedan en nada. Es necesario prestar la máxima atención ante correos sospechosos, pues no es oro todo lo que reluce.
Este tipo de correo spam, con asuntos como «últimas entradas a la venta» o descuentos en material promocional, desvían al usuario hacia falsas tiendas online desde las cuales la empresa en cuestión puede obtener numerosos datos personales de los usuarios.
Es prioritario comprobar que el website al que se dirige al usuario no es un hospedaje fraudulento y cumple las ordenanzas de las ley LSSICE, ley que regula el comercio electrónico y otros servicios de internet cuando se engloban dentro de una actividad económica. Esta ley, formulada y aprobada para proteger al consumidor, engloba aspectos como la contratación de bienes y servicios por vía electrónica, el suministro de información por dicho medio y el envío de comunicaciones comerciales.
Una vez cerciorados de que la página web a la que accedemos respeta esta regulación, podemos afrontar las estafas por internet prestando especial atención al propio equipo desde el que nos conectamos y la forma cómo lo hacemos. De hecho, es aconsejable proteger los equipos informáticos y smartphones desde los que nos conectamos, para preservar aún más la seguridad con filtros antispam y programas antivirus, además de evitar realizar transacciones bancarias usando redes WIFI públicas, así como desactivar la función Bluetooth y las redes inalámbricas en el teléfono móvil, ya que pueden proporcionar una vía de entrada de archivos malignos.
Toda prevención es poca para proteger nuestros datos personales. Así que es recomendable no ofrecerlos a ninguna empresa si no estamos completamente seguros de que respetan la LOPD y la LSSICE.