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La novedosa legislación de protección de datos europea se encuentra con las críticas del Supervisor europeo del sector

Peter Hustinx refleja en un informe sus dudas sobre la idoneidad de esta nueva norma. La elaboración por parte de la Unión Europea de un acta única que sirva para enmarcar todas las políticas legislativas de sus países miembros en materia de protección de datos personales continúa su camino. Un camino en el cual se está encontrando con muchas voces discordantes, que critican varios aspectos de su contenido y elaboración.

La última de estas voces quizás es la más sorprendente, por venir de un organismo de la propia Unión Europea, como es el Supervisor europeo de protección de datos. Esta figura, creada en 2004 como entidad independiente que velase por el correcto respeto a la protección de datos personales, y que se encuadra en la persona de Peter Hustinx y Giovanni Buttarelli como supervisor y supervisor adjunto, respectivamente, ha saltado a la palestra para emitir algunas opiniones poco favorables sobre el acta.

Hustinx, concretamente, ha expresado sus dudas sobre si la aplicación estricta del acta no podría derivar en amenazas a la intimidad personal de los ciudadanos, especialmente en el contexto de la monitorización de usuarios dentro del campo de las nuevas tecnologías.

Asimismo, el supervisor ha expresado sus dudas sobre las garantías procesales que contiene el acta en materia de protección de derechos, recomendando la revisión de las mismas al considerarlas contrarias, en algunos casos, a ciertos artículos de la Declaración de los Derechos Humanos. Concretamente se refiere Hustinx con estas palabras a la contraversión de la presunción de inocencia, que pudiera aparecer en este Acta, tal y como declararon en su día sectores de la abogacía y la consultoría de protección de datos.

 Habrá que permanecer muy atentos a la evolución legislativa y de aplicación de la citada acta. Cabe aventurar, sin embargo, que esta crítica desde un contexto tan cercano a la propia Unión Europea supone, más que una advertencia, una piedra de toque que deberá ser superada en el debate que sobre esta norma jurídica se lleve a cabo en el Parlamento Europeo.

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