Sin duda, uno de los elementos informáticos que más controversia suscitan acercan de la protección de datos en la red son las cookies, una de las herramientas más habituales de los responsables de páginas web para recoger datos de navegación de sus usuarios. Hasta ahora, tenían vía libre para su instalación en los equipos, pero la nueva legislación les requerirá tener permiso de los internautas para su instalación.
Una vez entran en nuestro ordenador, las cookies registran información sobre las páginas web que visitamos y las envían a los responsables de publicidad de tiendas online y responsables de campañas. Esta actividad representa un ataque a la protección de datos en la red, ya que hasta ahora no había manera de evitar su instalación. Por esta razón, muchos colectivos de internautas hace tiempo que vienen pidiendo su regulación.
Diversas organizaciones relacionadas con la protección de datos en la red y el uso publicitario de Internet, como la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) y la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), han colaborado para crear una ‘Guía sobre las normas de uso de las cookies’, que recoge una serie de consejos y obligaciones que las empresas deben tener en cuenta a la hora de su uso, para no salirse de la legislación vigente en este tema. También desde el sector de la consultoría de protección de datos en la red se trabaja para conseguir un uso más racional de las cookies.
La necesidad de un consentimiento informado
Los usuarios deben ser conscientes de que el uso de cookies implica que se descarga en su equipo un archivo que recupera y almacena información de sus hábitos de navegación. Esto puede representar un grave problema para la protección de datos en la red.
Por esta razón, la guía advierte de la necesidad de obtener el consentimiento del usuario para la instalación de cookies, ya sea a través de un clic directo en un ‘acepto’ o de la existencia de un apartado informativo sobre el uso de cookies. De esta manera, se dará por supuesto que el usuario, con la información en sus manos, decide seguir adelante en su uso. Asimismo, la web debe explicar a los usuarios cómo puede retirarse el consentimiento y eliminar las cookies ya instaladas en su ordenador.
